LA ALDEA DE LA MONTAÑA

En el pueblo de abajo había un colegio y el maestro saco ha su discípulos ha hacer un recorriendo por la montaña llegaron a una remota aldea en la que se respiraba el olor más insoportable, el maestro abrió, la puerta de una casuchas miserables, sus habitantes estaban, sumergidos en una profunda de presión y desesperanza.El maestro pregunto a uno de sus habitantes. -De que viven. Cómo se mantienen vivos. - De una vaca, de su leche nos alimentamos, elaboramos un poco de crema y mantequilla con lo que sacamos lo indispensable.El maestro continuó su camino y ordeno a su discípulo. Por la noche toma la vaca y lánzala al precipicio. -su aluzno le contesto.- Maestro, es una gran injusticia lo que me ordena, estos pobres viven solamente de la vaca seguramente morirán de hambre.-Has lo que te ordeno. El discípulo obediente cumplió al pie de la letra las instrucciones,- pasaron los años y ahora el discípulo ya convertido en Maestro y se acordaba de aquella aldea, fue a visitar nuevamente a esa aldea pues no lograba comprender tan extraña e injusta decisión de su Maestro en el aquel entonces.Cual fue su sorpresa al encontrarse con un pueblo renovado, se respiraba prosperidad, la mirada y actitud de sus habitantes eran totalmente diferentes, los niños tramitan felicidad y alegría y buena salud el.Pregunto qué ha sucedido, a qué se debía ese cambio. - Hace años vivamos todos solamente de una vaca, una mañana amaneció muerta en el fondo del precipicio, desesperados empezamos a imaginar que hacer para sobrevivir, vendimos la carne y con ese dinero compremos semillas y sembramos hortalizas, con esos productos adquirimos gallinas, con la venta de los huevos adquirimos un cerdo.Así continuó contando la cadena de valor que habían creado, con lo cual el maestro reflexionó.- Entendió ahora ha su propio maestro, que a esta gente los hizo despertar de un aletargado sueño que se llama resignación y que se convierte en el alimento de la mendicidad. Bendita advertencia que nos lanza a triunfar en la vida… YO MISMO